Cuentos de agricultura orgánica sostenible. Presentamos el programa Plan lector con énfasis en agricultura orgánica sostenible de WBC, que promueve la agricultura orgánica, responsable y sostenible desde edades tempranas, en línea con los diferentes programas promovidos por entidades reguladoras de la producción y comercialización de productos orgánicos como la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Orgánica (IFOAM)

En qué consisten los Cuentos de agricultura orgánica sostenible

La serie de plan lector de agricultura orgánica sostenible es una serie de Plan Lector Ecológico, que busca no solo entretener a los lectores, sino que también brinda educación sobre la importancia de la ecología y los cultivos orgánicos sostenibles. Estos libros son una combinación perfecta de diversión, magia y enseñanzas reales.

Imaginemos sumergir a los niños en un mundo lleno de cuentos encantadores, donde los personajes fantásticos les lleven de la mano a descubrir de dónde vienen los alimentos que consumimos a diario. A través de estas historias mágicas, los lectores aprenderán sobre el fascinante proceso de cultivo orgánico, desde la siembra hasta la cosecha.

Pero eso no es todo. Estos libros con historias de agricultura orgánica sostenible están impresos en papel ecológico, lo que significa que no solo estamos cuidando la imaginación de los lectores, sino también el medio ambiente. Creemos en la importancia de transmitir valores ecológicos desde temprana edad, y qué mejor manera de hacerlo que a través de libros que respetan nuestro entorno.

Como complemento importante, cada libro contiene semillas naturales y orgánicas del cultivo que se presenta en cada cuento de agricultura orgánica sostenible. Los lectores no solo aprenderán cómo se cultivan los alimentos, sino que también podrán experimentar el proceso de sembrar y cuidar sus propias plantas. Imaginemos la emoción en sus ojos cuando vean crecer las verduras y frutas cultivadas por ellos mismos.

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Además de priorizar la importancia de la agricultura ecológica, también se muestra cómo combatir las plagas de manera orgánica y responsable. Los lectores aprenderán a proteger sus cultivos sin dañar el medio ambiente, convirtiéndose en guardianes de la naturaleza. Cada historia está llena de principios y valores y cada una resalta un valor moral. Al finalizar, el lector puede divertirse con crucigramas, sopas de letras, coloreando los personajes, resolviendo las preguntas de compresión lectora, inferencia, etc., y seguir el paso a paso para plantar sus semillas, en una matera de su casa, o en el huerto escolar.

PLAN LECTOR DE AGRICULTURA ORGÁNICA SOSTENIBLE:

UNA PROPUESTA DE EDUCACIÓN ECOLÓGICA RESPONSABLE CON ENFOQUE DE RECUPERACIÓN PSICO-SOCIAL PARA POBLACIONES RURALES Y URBANAS DE COLOMBIA.

RESUMEN

La conciencia sobre la importancia de los recursos naturales ha crecido en la sociedad global. Sin embargo, el mal uso del suelo y las prácticas agrícolas deficientes han generado efectos negativos en la salud y calidad de vida. Por ello, cada vez más personas optan por la agricultura ecológica sostenible, tanto en el ámbito rural como urbano.

Si nos enfocamos en la educación de primera infancia para crear una conciencia ambiental responsable que fomente la agricultura orgánica sostenible, podremos lograr que Colombia sea ejemplo internacional y se genere inclusión sustentable para mejorar la salud y calidad de vida de todos los ciudadanos.

INTRODUCCIÓN

La sociedad ha reconocido la importancia de los recursos naturales y el impacto negativo que el mal uso de los suelos y las prácticas agrícolas precarias tienen en la salud y calidad de vida. Cada vez más personas optan por un desarrollo sostenible y la agricultura orgánica sostenible se destaca como una alternativa sectorial importante, tanto en el ámbito rural como en el urbano, con las huertas caseras implementadas por diversos países.

Este proyecto, en particular, a través de los libros de agricultura orgánica sostenible busca la oportunidad de que los niños de básica primaria de las regiones rurales y urbanas se capaciten en el conocimiento del origen de los alimentos, la ventaja de la agricultura orgánica sostenible y el cuidado ambiental en general. Esto traería beneficios económicos, psico-sociales, ambientales y de salud, además de una ventaja competitiva a nivel local y mundial. Colombia ha establecido Acuerdos de Libre Comercio con países interesados en estos productos, que valoran una alimentación saludable y la preservación del medio ambiente.

1.1    DESCRIPCIÓN

La agricultura desempeña un papel vital en la economía nacional, brindando ingresos en áreas rurales y contribuyendo a la reducción de la pobreza. El informe Agricultura para el Desarrollo afirma: “Con políticas adecuadas e inversiones que las respalden en el nivel local, nacional e internacional, este sector ofrece nuevas oportunidades para salir de la pobreza a cientos de millones de personas de las zonas rurales.” (Banco Mundial, 2008).

Sin embargo, existen desafíos importantes que dificultan alcanzar este objetivo, como la necesidad de un mayor respaldo estatal en forma de inversiones y subsidios para las comunidades rurales y urbanas que se dedican a la agricultura; Adicionalmente, la capacitación agrícola orgánica y sostenible, en los colegios públicos y privados, en algunos casos es nula y, en otros, deficiente.

Es fundamental destacar la importancia de la agricultura orgánica como una alternativa clave para el desarrollo sectorial y la producción sostenible. Esta práctica ofrece beneficios significativos en términos de salud del consumidor, conservación del medio ambiente y mitigación de impactos ambientales, además de ser una alternativa para la sustitución de cultivos ilícitos. Sin embargo, se requiere un mayor apoyo y conciencia educativa para fomentar su adopción y aprovechar plenamente su potencial, lo cual se sugiere hacer desde la primera infancia en las instituciones educativas públicas y privadas.

 Colombia, tiene un gran potencial de desarrollo agrícola y ofrece oportunidades excepcionales para que, a futuro, se generen empresas agrícolas que puedan internacionalizarse y establecer alianzas estratégicas con otras empresas del sector. Esto permitiría aumentar las exportaciones de productos orgánicos, generando beneficios económicos, culturales, ambientales y de salud, y fortaleciendo la competitividad tanto a nivel local como nacional.

A pesar de los avances en la agricultura orgánica, aún persisten desafíos en la implementación de políticas agrarias coherentes y en el aprovechamiento efectivo de los recursos disponibles en el país. Es fundamental impulsar un enfoque integral y promover la planificación y ejecución adecuada de políticas agrarias, lo cual permitiría a los agricultores participar activamente en el comercio departamental, nacional e internacional y satisfacer la creciente demanda de productos como abonos, legumbres, hortalizas, tubérculos, frutas y plantas aromáticas en el mercado global.

En resumen, el enfoque educativo en la agricultura orgánica sustentable tiene el potencial de contrarrestar los efectos negativos de las técnicas convencionales y promover el bienestar —económico y psico-social—, así como la equidad y la sustentabilidad en la población. Es esencial reflexionar sobre el potencial de la agricultura orgánica sostenible, establecer alianzas estratégicas y fortalecer la actividad agrícola, a través de políticas claras, educación desde la primera infancia, apoyo institucional y acceso al mercado departamental, nacional e internacional.

¿Cómo puede Colombia capacitar a la primera infancia en educación agrícola orgánica sostenible?

3.1    OBJETIVO GENERAL

Proponer un programa de capacitación en agricultura orgánica sostenible, para los estudiantes de básica primaria en los grados de transición a quinto de primaria, a través de cuentos de agricultura orgánica sostenible.

3.2                  OBJETIVOS ESPECÍFICOS

Educar a los estudiantes de básica primaria en el conocimiento de la agricultura orgánica sostenible.

Suministrar material pedagógico a los estudiantes de básica primaria, que enseñen de forma divertida y objetiva el conocimiento de la agricultura orgánica sostenible.

Señalar la evolución de la agricultura orgánica sostenible en el país y los factores de éxito que acompañan su desempeño.

Identificar los principales retos y desafíos que enfrenta la agricultura orgánica.

Brindar alternativas de recuperación psico-social a la primera infancia como alternativa para la prevención de adicciones y la sustitución de cultivos ilícitos.

Promover la lectura y su comprensión mediante libros con actividades.

Promover el bilingüismo a través de libros que fomentan la agricultura orgánica, tanto en inglés como en español.

• JUSTIFICACIÓN

Los agricultores de Colombia, y en general los agricultores colombianos enfrentan desafíos en el desarrollo sectorial debido a la falta de una política integral, infraestructura limitada y baja productividad, en parte por falta de una política educativa desde primera infancia. La apuesta por la producción de bienes orgánicos presenta oportunidades de precio, rentabilidad y expansión del sector, especialmente en el mercado internacional. Se destaca la importancia de las alianzas intra e intersectoriales para promover la producción, distribución y consumo de estos productos amigables con el medio ambiente, que se consideran una respuesta adecuada a los cambios en los mercados internacionales.

Colombia cuenta con Acuerdos de Libre Comercio con varios países, lo que ofrece la oportunidad de exportar frutas y verduras orgánicas y mantenerse en el mercado global como un país competitivo. Además, existen entidades reguladoras y certificadoras reconocidas a nivel internacional, respaldando la producción y comercialización de productos orgánicos. La tendencia creciente hacia el consumo de productos libres de agroquímicos refleja una preocupación por la salud, el medio ambiente y el apoyo a prácticas agrícolas sostenibles.

La educación desde primera infancia deja huellas positivas a los futuros agricultores, quienes verán la agricultura orgánica como una alternativa sostenible, saludable y culturalmente aceptada en el ámbito mundial.

Este proyecto se apoya en una serie de Plan lector enfocado en la productividad agrícola orgánica y sostenible, así como en el fomento de los buenos principios y valores morales, con cuentos fantásticos, divertidos, llenos de actividades curriculares e impresos en papel ecológico. Los contenidos dinámicos, llenos de magia y diversión para los estudiantes, buscan no solo entretener a los lectores, sino que también les brindan educación sobre la importancia de la ecología y la agricultura orgánica sostenible. Estos libros son una combinación perfecta de diversión, magia y enseñanzas reales que ayudará a los educandos a fortalecer sus bases culturales y científicas.

• MARCO LEGAL

Este proyecto está basado en las diferentes leyes y normas que propenden por la educación, el cuidado del medio ambiente y la salud humana, entre las cuales se encuentran:

CONPES No. 2544 – DEPAC de agosto 1 de 1991 “Una Política Ambiental para Colombia” – DNP

Ley 99 de 1993: Por el cual se crea el Ministerio de Medio Ambiente y se organiza el Sistema Nacional

Ambiental SINA.

Decreto 309 del 2000: Reglamenta la investigación científica sobre diversidad biológica.

• Política Nacional de Investigación Ambiental, 2001: Busca fortalecer la capacidad nacional y regional

que impulse la generación y utilización oportuna de conocimientos relevantes para el desarrollo

sostenible.: Orienta los esfuerzos de las diferentes organizaciones y entidades, estableciendo los

principios, estrategias y retos de la Educación Ambiental.

• Política Nacional de Educación Ambiental del 2002. Documento MEN – MMA

• Política Nacional de educación ambiental- 2003, que propende por la coordinación con diferentes

actores, ámbitos y escenarios para reconstruir la cultura y orientarla hacia una ética ambiental, en el

marco del desarrollo sostenible.

Resolución 1023 de 2010 del Ministerio de Ambiente “Por la cual se adopta el protocolo para el

monitoreo y seguimiento del Subsistema de Información sobre Uso de Recursos Naturales

Renovables SIUR para el sector manufacturero y se dictan otras disposiciones”

Ley 1549 de 2012 “por medio de la cual se fortalece la institucionalización de la política nacional de

educación ambiental y su incorporación efectiva en el desarrollo territorial.”

• Política Pública De Seguridad Alimentaria y Nutricional Para Bogotá: Construyendo Ciudadanía

Alimentaria 2019-2031.

Acuerdo 407 de Julio-08 de 2015: Se establece un acuerdo marco entre el MEN y MADS. Alianza

Nacional por “La formación de una ciudadanía responsable: un país más educado y una cultura

ambiental sostenible para Colombia”.

Decreto 1743 de 1994 del ministerio de educación “por el cual se instituye el Proyecto de Educación

Ambiental para todos los niveles de educación formal, se fijan criterios para la promoción de la

educación ambiental no formal e informal y se establecen los mecanismos de coordinación entre el

Ministerio de Educación nacional y el Ministerio del Medio Ambiente.”

• Ley 115 de 1994, la estructura del servicio público educativo está organizada para formar al educando

en la protección, preservación y aprovechamiento de los recursos naturales y el mejoramiento de las

condiciones humanas y del ambiente.

Plan Nacional de Lectura, Escritura y Oralidad.

• MARCO TEÓRICO

La agricultura sostenible y orgánica se ha vuelto una alternativa al modelo tradicional y se basa en principios de desarrollo sostenible. Ha ganado protagonismo a nivel internacional, con el respaldo de organizaciones como la OCDE y la FAO. Existen experiencias y políticas en favor de la agricultura sostenible, pero se requiere una mejor integración de aspectos educativos, económicos, sociales y ambientales.

El resurgimiento de la producción orgánica se originó en Alemania e Inglaterra y se ha extendido globalmente debido a la conciencia ambiental, la preocupación por la salud y la preservación de las comunidades rurales. El sector orgánico ha experimentado un crecimiento significativo y se ha convertido en una parte importante del mercado de alimentos, con estimaciones de un mercado mundial de US$60 mil millones para 2018. En América Latina, Argentina, Uruguay, Brasil y Chile son países destacados en la producción orgánica.

El éxito de la agricultura orgánica está relacionado con la educación primaria, la posterior certificación de productos, la garantía de origen, la calidad de los alimentos, la participación de los supermercados, el conocimiento del consumidor sobre la salud y el medio ambiente, y los estímulos políticos para la conversión hacia la agricultura ecológica. Para esto último, es de vital importancia la educación en edades tempranas, ya que los niños de hoy son los futuros agricultores o empresarios agrícolas de nuestro país.

• DISEÑO DE LA SERIE DE PLAN LECTOR

Utilizando la creatividad, la magia y los personajes fantásticos, se tejen historias aptas para niños de todas las edades, diferenciadas por grados escolares. Se ha buscado brindar información real de los cultivos, las plagas que los afectan, cómo superarlas de forma natural, y otros detalles verdaderos, pero inmersos en historias del tipo “Cuentos de los Hermanos Grimm”, para de esta manera captar la atención de los niños.

A través de estas historias mágicas, los lectores aprenderán sobre el fascinante proceso de cultivo ecológico, desde la siembra hasta la cosecha.

Adicionalmente, estos libros están impresos en papel ecológico, lo que significa que no solo estamos cuidando la imaginación de los lectores, sino también el medio ambiente. Creemos en la importancia de transmitir valores ecológicos desde temprana edad, y qué mejor manera de hacerlo que a través de libros que respetan nuestro entorno.

Como complemento importante, cada libro contiene semillas naturales y orgánicas del cultivo que se presenta en cada cuento. Los lectores no solo aprenderán cómo se cultivan los alimentos, sino que también podrán experimentar el proceso de plantar y cuidar sus propias plantas. Para este propósito, se incluye el paso a paso de cómo plantar, en una matera o en el huerto escolar, las semillas suministradas en cada cuento, y cómo cuidarlas de manera natural.

• CARACTERÍSTICAS DE LA AGRICULTURA SOSTENIBLE Y EVOLUCIÓN RECIENTE A NIVEL MUNDIAL

El Instituto de Investigación de Agricultura Orgánica (FiBL) publicó un informe reciente que destaca el crecimiento y la expansión de la agricultura orgánica en todo el mundo. Según el informe, el año 2018 fue muy positivo en términos de resultados.

En total, se evaluaron datos de 186 países y se encontró que se cultivaron aproximadamente 71.5 millones de hectáreas de tierras orgánicas, incluyendo áreas en proceso de reconversión. Las regiones que se destacaron por tener la mayor extensión de tierras dedicadas a la agricultura orgánica fueron Oceanía con 36 millones de hectáreas, Europa con 15.6 millones, América Latina con 8 millones, Asia con 6.5 millones, América del Norte con 3.3 millones y África con 2 millones de hectáreas.

Además, se observó un aumento en el espacio dedicado a la producción orgánica en general, con un crecimiento del 2.9% o 2.02 millones de hectáreas adicionales. Varios países experimentaron un aumento significativo en su producción orgánica. Por ejemplo, Francia aumentó un 16.7% (cerca de 0.27 millones de hectáreas) y Uruguay incrementó un 14.1% (alrededor de 0.24 millones de hectáreas).

Al analizar las regiones, se encontró que Europa aumentó su espacio en un 8.7% (1.25 millones de hectáreas), Asia en un 8.9% (0.54 millones de hectáreas), África en un 0.2% (4.000 hectáreas), América Latina en un 0.2% (13.000 hectáreas), América del Norte en un 0.1 millones de hectáreas (casi un 3.5%), y Oceanía en un 0.3% (0.1 millones de hectáreas). Los países con la mayor cantidad de tierras destinadas a la agricultura orgánica son Australia con 35.6 millones de hectáreas, seguido de Argentina con 3.6 millones y China con 3.1 millones.

En general, en 16 países, el 10% o más de la tierra dedicada a la agricultura es orgánica. Este crecimiento refleja un cambio cultural hacia la sostenibilidad, la conservación del ecosistema y la conciencia sobre los impactos negativos de los pesticidas y sustancias tóxicas en la salud humana, animal y el medio ambiente. Además, impulsa la demanda de productos orgánicos y ecológicos, lo que conduce a un mercado justo donde los consumidores están dispuestos a pagar mejores precios por alimentos producidos de manera sostenible.

En cuanto a las regiones específicas, Oceanía destaca por ser la región con mayor participación y promoción de la agricultura orgánica, liderada por Australia, Nueva Zelanda y los Estados Insulares del Pacífico. Europa cuenta con 14.6 millones de hectáreas dedicadas a la producción orgánica, destacándose países como España, Italia, Francia y Alemania. América Latina tiene alrededor de 8 millones de hectáreas, con Argentina, Uruguay y Brasil a la cabeza. Asia cuenta con 6.1 millones de hectáreas, destacándose China. En América del Norte, se destinan 3.2 millones de hectáreas, con Estados Unidos como líder, y África cuenta con 2.1 millones de hectáreas, siendo India uno de los países destacados.

La agricultura orgánica se encuentra en la etapa 3.0, que implica la conversión generalizada de cultivos convencionales a cultivos autosostenibles. Esto requiere un enfoque en la sustentabilidad y la facilidad de acceso al conocimiento y la conexión entre los productores para la producción y comercialización. La agricultura sostenible se considera una alternativa de crecimiento y desarrollo en diferentes regiones del mundo.

En África, se reportaron 2.1 millones de hectáreas destinadas a la producción orgánica en 2017, con un aumento del 14% en adquisición de tierras y al menos 815,000 productores. Túnez lidera en área con 306,500 hectáreas, mientras que Uganda tiene el mayor número de productores. La mayoría de los productos orgánicos certificados se destinan a la exportación. En África, dos países tienen legislación orgánica, siete están en proceso y nueve tienen estándares nacionales. Se ha promovido la agricultura orgánica en conferencias y se busca la generación de alianzas y el apoyo financiero para la agricultura sostenible. A nivel global, la producción orgánica cuenta con 3 millones de productores, liderados por India, Uganda y México. Se destaca la necesidad de mejorar la comercialización internacional y establecer alianzas estratégicas para fortalecer la actividad. Aunque la agricultura orgánica presenta desafíos, su demanda crece y ofrece oportunidades para el desarrollo rural, la seguridad alimentaria y la conservación del medio ambiente. En Colombia, se han implementado programas de apoyo y promoción de productos orgánicos, pero se requiere mayor difusión, asociatividad y certificación para su consolidación en el mercado. Se reconoce el potencial económico y la rentabilidad de la producción orgánica, así como la importancia de la cooperación público-privada y la adopción de tecnologías ecológicas.

Asia cuenta con 6.1 millones de hectáreas destinadas a la producción orgánica, liderada por China con 3 millones de hectáreas. En total, 22 países de Asia tienen legislación de producción orgánica. En el sudeste de Asia, se llevó a cabo la primera feria Biofach patrocinada por el ministerio de comercio de Tailandia. Además, Asia cuenta con proyectos como ALGOA y The Organic Youth Forum para promover la agricultura orgánica. En América del Norte, Estados Unidos posee 2 millones de hectáreas y Canadá tiene 1.2 millones de hectáreas dedicadas a la agricultura orgánica. Ambos países han implementado iniciativas para promover la investigación y el desarrollo de la agricultura orgánica.

En resumen, la agricultura orgánica ha experimentado un crecimiento significativo en todo el mundo, con diferentes regiones y países liderando el movimiento hacia la sostenibilidad y la producción de alimentos saludables y respetuosos con el medio ambiente.

• ECONOMÍA AGRÍCOLA SUSTENTABLE EN COLOMBIA

En Colombia, al igual que en otros países, se busca implementar políticas y programas alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para abordar desafíos como la pobreza, el hambre, el empleo digno, la salud, el cambio climático y el consumo responsable. Aspectos que coinciden con los lineamientos y principios que guía a la agricultura sustentable, y de paso estimulan la producción de bienes orgánicos. Para lograr esto, es importante considerar las circunstancias y prioridades de cada país, aplicando el principio de equidad y desarrollando capacidades a medida que se avanza en la consecución de los objetivos. Además, es necesario establecer requisitos y políticas que respalden la ejecución de los programas, incluyendo la educación agrícola desde temprana edad y el apoyo tecnológico y financiero.

La búsqueda de una agricultura orgánica sostenible implica mejorar la eficiencia en el uso de recursos, promover la productividad urbana y rural, conservar y proteger los recursos naturales, y fortalecer los medios de vida y el bienestar social en las áreas urbanas y rurales. Este enfoque también contribuye a reforzar la resiliencia de las personas, comunidades y ecosistemas. Asimismo, se busca un desarrollo territorial inclusivo y participativo, que permita abordar el conflicto, sustitución de cultivos ilícitos y combatir la pobreza de manera más efectiva.

En el marco de los ODS, la agricultura sostenible ofrece un escenario importante para fortalecer la cooperación institucional entre países, compartiendo experiencias y aprendizajes a través de la Cooperación Sur-Sur. Aunque no existe un modelo único que funcione para todos, las experiencias exitosas pueden servir de referencia y adaptarse a diferentes contextos para su implementación.

Es fundamental fortalecer la agricultura orgánica mediante acciones conjuntas como el financiamiento de proyectos, facilitar la comercialización, promover esta práctica a través de políticas estatales y establecer políticas que estandaricen la producción, el empaque y el etiquetado de los productos para ingresar al mercado internacional. En América Latina y el Caribe, se busca emular experiencias exitosas de la Unión Europea en términos de políticas agroambientales y estándares compartidos en la producción, distribución y consumo de productos orgánicos. Esto permitiría mejorar la agricultura orgánica en Colombia, promoviendo políticas públicas y marcos institucionales que impulsen la seguridad alimentaria, el desarrollo territorial y la mejora continua.

Tanto en Colombia, como a nivel nacional, se reconoce el esfuerzo presente para el desarrollo agrícola orgánico y su importancia para garantizar la seguridad alimentaria a largo plazo, proteger el medio ambiente y mejorar las condiciones de los agricultores. Sin embargo, se deben cerrar las brechas entre la oferta y la demanda en los mercados locales e internacionales, superando desafíos como la propiedad de la tierra, la pobreza, la violencia y la producción de narcóticos. Además, se destaca la necesidad de una educación temprana, para crear una conciencia ecológica que perdure a futuro, y la participación multisectorial junto con una coordinación interinstitucional efectiva y sólida para optimizar los esfuerzos en favor de una agricultura sostenible y competitiva.

Es importante tener en cuenta que las instituciones y los actores involucrados en la cadena de producción, manufactura, distribución y consumo desempeñan un papel crucial en el desarrollo agrícola sostenible. La coordinación entre estos actores a nivel nacional, departamental y local es determinante para aprovechar las oportunidades de la cadena. Sin embargo, se reconoce la diferencia conceptual entre las estrategias a nivel nacional y territorial, lo que dificulta el diseño de estrategias basadas en la consulta de las oportunidades que brinda la cadena. Es necesario aceptar que las instituciones y las formas de relación entre los actores pueden ser decisivas para optimizar los esfuerzos en favor de la economía agrícola sostenible y facilitar su implementación en el desarrollo territorial.

En Colombia, la agricultura orgánica enfrenta desafíos debido al desconocimiento y la falta de apoyo, lo que limita su desarrollo y la demanda de productos orgánicos en comparación con países europeos y norteamericanos. Los consumidores colombianos aún no han internalizado los beneficios sustanciales y ventajosos de la producción, consumo y comercialización basados en técnicas sostenibles. Es necesario promover una mayor educación y participación en este mercado, educando y promocionando los beneficios en términos de salud, de lo social y de lo económico.

La agricultura orgánica está sujeta a normativas que varían según el país y las políticas establecidas. Estas regulaciones buscan estandarizar la producción y establecer requisitos para obtener certificaciones necesarias a nivel nacional e internacional, garantizando la comunicación y la interpretación uniforme en procesos como el etiquetado, el marcado y el empaque, tanto para los productores como para los consumidores. Sin estas normativas, no se podría garantizar a los consumidores que los productores cumplen con los parámetros necesarios para ofrecer productos realmente beneficiosos en términos de salud y cumplir con las normas de otros países para la comercialización respaldada por tratados de libre comercio y acuerdos comerciales. Es fundamental que los productores y empresas que deseen comercializar productos orgánicos obtengan certificaciones para aprovechar los amplios beneficios que esta práctica conlleva.

En cuanto al comercio exterior, Colombia exporta el 95% de su producción orgánica. A nivel mundial, la participación de Colombia, según la Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Orgánica (IFOAM), es de solo el 0.08% de la producción total.

La comercialización de productos orgánicos en Colombia se centra principalmente en grandes superficies que atienden a segmentos dispuestos a pagar un precio más alto por productos de mejor calidad. Sin embargo, es necesario promover una mayor difusión y apoyo por parte del gobierno debido a los costosos requisitos de certificación y comercialización. A pesar de que los productos orgánicos colombianos son bien aceptados en los mercados internacionales y se alinean con la creciente cultura de consumo saludable y sostenibilidad, aún existen brechas con países más desarrollados.

Colombia cuenta actualmente con 16 acuerdos comerciales, incluyendo tratados de libre comercio y acuerdos de alcance parcial. Estos acuerdos con la Unión Europea, MERCOSUR, Alianza del Pacífico, Canadá y los países de la Asociación Europea de Libre Comercio (AELC/EFTA) brindan oportunidades para incrementar las exportaciones de frutas y verduras orgánicas, convirtiendo a Colombia en un país competitivo. Para lograrlo, es necesario aprovechar al máximo el apoyo de entidades gubernamentales, implementar planes de desarrollo sostenible y adaptar estrategias basadas en las prácticas prioritarias de otros países.

Es importante destacar que la institucionalización de la agricultura orgánica en Colombia avanza mediante la participación en programas promovidos por entidades reguladoras como la FAO y la IFOAM, y respaldada por organismos certificadores como ECOCERT, CERES y Biotrópico. Esto destaca la necesidad de fortalecer las instituciones, crear redes de cooperación y fomentar alianzas efectivas.

Es crucial tener en cuenta que en países demandantes de productos orgánicos como Australia, la Unión Europea, Estados Unidos y Canadá, los alimentos solo pueden ser etiquetados como “ecológicos” si al menos el 95% de sus ingredientes agrícolas se han producido de manera ecológica. La importación de productos orgánicos de terceros países solo está permitida si se cumplen condiciones similares o equivalentes a las de los países importadores, lo cual se verifica a través de inspecciones certificadas y certificados de importación. Aunque Colombia ha ganado espacio en las exportaciones debido a la oferta de alimentos que no se producen en ciertas regiones de otros países, aún debe cumplir con las normas y garantías de certificación, inspección, condiciones sanitarias, embalaje adecuado y distribución.

1. CONCLUSIONES

La agricultura orgánica representa una alternativa sostenible y saludable, no solo en la producción de alimentos, sino en la recuperación psico-social de la niñez y, aunque existen políticas a favor, así como avances significativos en Colombia en términos de producción y participación en los mercados nacionales e internacionales, hay importantes desafíos en cuanto a la falta de conocimiento y condiciones adecuadas por parte de los agricultores y consumidores, así como la necesidad de una mejor organización, estandarización y certificación de productos.

En Colombia, para proyectar el municipio como líder en el sector, se hace necesario crear una conciencia temprana en nuestra niñez, a través de métodos infantiles que perduren en la memoria de los educandos. Para este efecto, los cuentos de hadas o cuentos fantásticos, resultan ser de gran valor memorable que inculcan, de manera subliminal, principios y valores morales así como conocimientos agrícolas orgánicos sostenibles.

Los acuerdos comerciales internacionales brindan oportunidades para la comercialización de productos orgánicos, pero aún se deben superar obstáculos en logística, distribución y acceso a mercados. Es fundamental fortalecer el componente institucional, desarrollar políticas públicas coherentes y promover alianzas entre el sector público y privado, especialmente entre grandes y pequeños productores. La certificación es un aspecto exigente y costoso, pero necesario para exportar.

La implementación de la economía circular en las empresas colombianas puede aumentar su competitividad al desarrollar bienes y servicios de manera eco-innovadora. Esto permitirá una producción y uso sostenible, generando alianzas y beneficios económicos, sociales y políticos.

En resumen, la agricultura orgánica tiene un gran potencial, Tanto en Colombia, como en toda Colombia, pero requiere de un enfoque integral que aborde desafíos como el conocimiento, la organización, la certificación y el acceso a mercados. Es necesario fortalecer las instituciones, promover alianzas estratégicas y concientizar tanto a productores como consumidores. La implementación de prácticas sostenibles y la economía circular son clave para lograr una producción y consumo responsable.

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